¿Vas a cambiar de tele y no te decides? Que no cunda el pánico: acudimos en tu ayuda.
Con lo de las plataformas de streaming, nunca fue tan interesante ver la tele: te puedes pasar horas viendo series, películas, documentales… hay de todo y muy variado. Evidentemente, la experiencia de visionado va a depender de la tele, pero, ¿cómo elegir bien? ¿Cuál es la que más te conviene?
Un buen televisor puede durar más de diez años (los de nuestros padres podían cumplir hasta los cuarenta y más), pero hoy, entre la obsolescencia programada y los gustos caprichosos del público, los cambiamos antes: en torno a los siete años de vida.
Ya sabemos que hay distintos tamaños de pantalla, la más vendida es la de 55 pulgadas (una tele de 55 pulgadas tiene 140 cm de diagonal y 122 de ancho). Elegir uno u otro tamaño dependerá del espacio que tengas en tu salón (si es muy grande o pequeño) y de la utilidad que le vayas a dar al televisor. Si eres consumidor de cine o de documentales, te interesa una pantalla grande (de 55 en adelante).
Si no utilizas mucho la tele y el salón pequeño, una de 40 o de 46 pulgadas te será suficiente. En todo caso, esto es una de las primeras cosas que tienes que valorar: la pantalla debe ir acorde con la superficie de tu salón y con la distancia que haya entre el sofá y el sitio donde vayas a ponerla.
¿A qué distancia verla? Los televisores de 4K en adelante no pierden definición si se ven de cerca, pero una distancia inadecuada puede provocar mareos… por eso, antes de comprar una tele mide la distancia que hay entre el sofá y el sitio donde vayas a ponerla. Las pantallas de entre 43 y 50 pulgadas deben colocarse a un mínimo de 2,4 metros y un máximo de 3,2 metros del sofá. Si la tele tiene entre 51 y 55 pulgadas, ponla a 2,8-3,6 metros. A la hora de instalarla, comprueba que el centro de la pantalla está a un metro por encima del suelo.
Más aspectos, ¿de qué depende la calidad de la imagen? El que una tele se vea mejor o peor depende sobre todo de la resolución o dicho de otra forma, de los píxeles por pulgadas, PPI. Existen dos tipos de pantalla: Full HD y UHD. Estas últimas tienen más resolución y pueden ser de 4K (4.000 píxeles horizontales) y de 8K.
Verás en la información del televisor que puede ser HDR 10, 10+ y Dolby Vision. Las primeras son asequibles y se ven muy bien (HDR se refiere a que son teles en las que todas las imágenes se ven perfectamente, incluso las más oscuras y las más claras). Las HDR 10+ consumen menos que las primeras y ofrecen más detalle, y las Dolby Vision son las mejores.
A la hora de comprar la tele, mira también que tenga “entradas”, para que puedas conectar a la consola, el ordenador, un pen…. La pantalla debería tener 1-2 puertos USB y varias conexiones HDMI. El puerto HDMI STB sirve para conectar el decodificador de tu operador. Los otros puertos HDMI, para la videoconsola y el ordenador. Asegúrate también de que la tele incluye Bluetooth porque es imprescindible si quieres utilizar auriculares inalámbricos.
Si vas a comprar una Smart TV, mira que tenga aplicaciones que den acceso a las plataformas Netflix, HBO, Amazon Prime… que algunas no las incluyen.
Más consejos: una tele OLED consume menos que una LED, tenlo en cuenta si eres un gran consumidor de tele.
Fuente : Idealista
